La actual pandemia de SARS-CoV-2 representa una grave amenaza para toda la población y una cuestión de vital importancia para los operadores sanitarios, especialmente para los que operan en estrecho contacto con los pacientes, como los odontólogos y los higienistas dentales.
El SARS-CoV-2 se transmite fácilmente entre las personas por vía aérea, pero también es capaz de persistir en las superficies durante horas o incluso días. Esto representa un gran desafío para todo el personal del sector dental, por lo que la OMS sigue ofreciendo directrices generales basadas en los datos recopilados por los expertos de todo el mundo.
Considerando la magnitud de los riesgos a los que se exponen los operadores del sector dental según la OMS, este folleto señala algunas soluciones que pueden ser adoptadas en el interior de los consultorios odontológicos, donde la proximidad entre el paciente y el operador sanitario es inevitable durante el tratamiento y donde muchos procedimientos generan una elevada cantidad de aerosol.
El folleto ilustra la importancia de una intervención regular y del papel desempeñado por los sistemas y dispositivos de higiene integrados en el equipo y los aparatos de esterilización independientes y por los productos utilizados para proteger o desinfectar las superficies expuestas al riesgo de contaminación.
La estrategia para la prevención y el control de las infecciones elaborada por la OMS incluye otras recomendaciones, como el triaje y el uso correcto de los ambientes en el interior del consultorio odontológico.
La declaración de pandemia por parte de la OMS ha comportado la necesidad de definir una estrategia clara en la lucha contra el SARS-CoV-2, que empieza con la toma de conciencia de los riesgos y del impacto que esta pandemia producirá en el sector odontológico, tanto ahora como en el futuro.
La OMS ha planteado algunas cuestiones fundamentales que constituyen la estrategia de prevención y control de las infecciones. Estas pueden resumirse en 5 puntos clave:
Este folleto afronta la mayor parte de estos temas, examinando las situaciones específicas sujetas a riesgo de contaminación que requieren la máxima atención por parte de los operadores del sector dental. Su objetivo es ilustrar cómo las soluciones existentes, que en algunos casos ya han sido certificadas sobre la base de estudios y análisis científicos, forman parte simplemente de un procedimiento correcto y convalidado. Estas soluciones contribuirán a reducir de modo significativo los riesgos correlacionados con la infección por SARS-CoV-2.